MI APRECIACIÓN ACERCA DE LA EXPOSICIÓN RETROSPECTIVA "IN THE STUDIO", DEL ARTISTA PIERO QUIJANO PIMENTEL
Desde
el pasado 24 de septiembre del 2014, se
viene llevando a cabo la exposición retrospectiva “In the studio”, del artista
Piero Quijano, en la Luis Miró Quesada Garland de la Municipalidad de
Miraflores, la cual consiste en una selección de sus obras más representativas
en las técnicas del óleo y acrílico sobre lienzo, triplay y otros derivados de
la madera, que fueron realizadas entre los años 1989 al 2009.
Piero Quijano Pimentel (Lima-Perú, 1959)
Destacado Artista e ilustrador, con estudios de artes plásticas en la Escuela
Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú y de Historia del arte en
la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Desde hace varios años viene laborando
en medios de prensa escrita como ilustrador, labor que le ha dado notoriedad, debido
a la temática coyuntural de cada una de
sus ilustraciones y que incluso lo llegaría a convertir en víctima de la
censura cuando el gobierno de turno, bajo la figura del otrora "Instituto Nacional de
Cultura", obligara a retirar el afiche de su exposición antológica "Dibujos
en prensa 1990 - 2007" e incluso vetaron la misma, que se llevaría a cabo en
la “Casa Museo Mariátegui”, donde exhibía sus memorables, y algo controvertidas
ilustraciones, publicadas en medios de prensa escrita allá por el año 2007.
En
esta exposición retrospectiva, (La cual difiere temáticamente de sus críticas ilustraciones),
presenta diversas pero muy interesantes series: la primera, muestra una
estética singular, de trazos sueltos y rígidos, de una variedad cromática marcadamente
expresionista que consigue al emplear el color en su estado más puro sobre un
fondo neutro, con los que reproduce la Lima urbana de los 80 y 90’s tanto en su
paisaje lleno de contrastes en su arquitectura e iconografía.
Otra serie que sin duda alguna es la que más destaca, se pueden observar los diversos biotipos de la gente de nuestra tierra, la de aquellos migrantes de las zonas andinas y amazónicas quienes dieron matíz distinto a una Lima convulsionada, llena de prejuicios y discriminación-de la que fueron objeto-durante varias décadas(y que aún hoy, discretamente persiste.) sus lienzos registran el cómo éstos van adoptando una forma de ser y estar más “occidentalizada” alejándolos cada vez más de sus usos y costumbres procedentes de sus orígenes andinos o amazónicos en quienes se produce una forma de “alienación”, que se evidencia en sus nuevos gustos musicales, y en la moda de influencia estadounidense y europea.
También observamos una serie realizada sobre triplay pintado y recortado, que reproduce a jóvenes mestizos de la Lima de fines del siglo XX en pleno despertar sexual y su interacción con el sexo opuesto; y por último, una serie mucho más personal, donde plasma su predilección por el Jazz y el Rock and Roll, de todos los tiempos.
Otra serie que sin duda alguna es la que más destaca, se pueden observar los diversos biotipos de la gente de nuestra tierra, la de aquellos migrantes de las zonas andinas y amazónicas quienes dieron matíz distinto a una Lima convulsionada, llena de prejuicios y discriminación-de la que fueron objeto-durante varias décadas(y que aún hoy, discretamente persiste.) sus lienzos registran el cómo éstos van adoptando una forma de ser y estar más “occidentalizada” alejándolos cada vez más de sus usos y costumbres procedentes de sus orígenes andinos o amazónicos en quienes se produce una forma de “alienación”, que se evidencia en sus nuevos gustos musicales, y en la moda de influencia estadounidense y europea.
También observamos una serie realizada sobre triplay pintado y recortado, que reproduce a jóvenes mestizos de la Lima de fines del siglo XX en pleno despertar sexual y su interacción con el sexo opuesto; y por último, una serie mucho más personal, donde plasma su predilección por el Jazz y el Rock and Roll, de todos los tiempos.
Si
apreciamos detenidamente algunas de las series de Piero Quijano, podríamos
atrevernos a hacer un paralelismo en lo referente a la temática y en el empleo
del color con respecto a la obra del pintor Camilo Blas (Cajamarca-Perú1903 -
Lima,1985), discípulo de José Sabogal(Cajamarca-Perú, 1888 – Lima 1956) pero, a
diferencia de este, no retrató únicamente al hombre del ande, también retrató
los diversos tipos étnicos del Perú dentro de su entorno natural : costa ,
sierra y selva, en cambio Piero Quijano lo hace desde un contexto urbano: una
mirada a la realidad del migrante andino, del amazónico y de los
afrodescendientes dentro de la Lima ochentera del siglo XX. Igualmente, Camilo
Blás empleaba un color sin demasiadas mezclas o “sin cocinar”, también gustaba
de la música, en especial de la música criolla e incluso inmortalizó algunas
escenas de la jarana criolla limeña, en el caso de Piero Quijano, primero nos
muestra a los jóvenes peruanos de tres décadas atrás adoptando otras
preferencias musicales foráneas y al mismo tiempo nos traslada a una atmósfera mucho más
cosmopolita al inmortalizar a los íconos del jazz y el rock and roll, quienes irónicamente,
pese a su fama y talento fueron también fueron víctimas de la discriminación dentro
de los círculos sociales de su país por el hecho de ser en mayoría, Afroamericanos.
En conclusión:
La obra de Piero apela a nuestra memoria, evocando aspectos interesantes y
cotidianos de una Lima cada vez más lejana y además, es una revaloración de
nuestra pluriculturalidad y multietnicidad, resaltando la fuerza, el trabajo y
la belleza de los hombres y mujeres oriundos del Perú, alejándolos de
estilizaciones y mostrándolos tal como son en todos sus aspectos.
El trabajo artístico de Quijano contradice los cánones estéticos tanto a nivel técnico como en la temática: predominantemente de trazo fuerte y mostrando una Lima con diversidad étnica. Sus personajes están alejados-debido a su biotipo- de los parámetros de belleza europea, que tanto artistas, medios de comunicación masivos como la propia sociedad impusieron en el imaginario local (y que aún hoy persiste discretamente). Tanto en la década de los ochentas como en la Actualidad es tan común ver a hombres y mujeres de orígenes andinos que de forma consciente o inconsciente niegan su propia identidad, algo que más allá de la vanidad, surgiría por la necesidad de ser aceptado y valorado, tanto en el ámbito social como en el laboral, en una época en la cual una tez clara era sinónimo de “Buena Presencia” y que de algún modo condicionó al peruano promedio a intentar ser “blanco”, tal como lo ha manifestado en sus propias palabras el artista Piero Quijano: “…Quise tratar de registrar momentos de intensidad y belleza que aparecían intermitentemente en la cara de las chicas y los muchachos que transitaban por la gran ciudad de Lima(una juventud que no pasaría el previsible “casting” de la publicidad local ni del confort de la clase media peruana de hace veinte años- ni de ahora). Belleza y confort que se escondía entre una muchacha bonita y sin oportunidades…” .
El trabajo artístico de Quijano contradice los cánones estéticos tanto a nivel técnico como en la temática: predominantemente de trazo fuerte y mostrando una Lima con diversidad étnica. Sus personajes están alejados-debido a su biotipo- de los parámetros de belleza europea, que tanto artistas, medios de comunicación masivos como la propia sociedad impusieron en el imaginario local (y que aún hoy persiste discretamente). Tanto en la década de los ochentas como en la Actualidad es tan común ver a hombres y mujeres de orígenes andinos que de forma consciente o inconsciente niegan su propia identidad, algo que más allá de la vanidad, surgiría por la necesidad de ser aceptado y valorado, tanto en el ámbito social como en el laboral, en una época en la cual una tez clara era sinónimo de “Buena Presencia” y que de algún modo condicionó al peruano promedio a intentar ser “blanco”, tal como lo ha manifestado en sus propias palabras el artista Piero Quijano: “…Quise tratar de registrar momentos de intensidad y belleza que aparecían intermitentemente en la cara de las chicas y los muchachos que transitaban por la gran ciudad de Lima(una juventud que no pasaría el previsible “casting” de la publicidad local ni del confort de la clase media peruana de hace veinte años- ni de ahora). Belleza y confort que se escondía entre una muchacha bonita y sin oportunidades…” .
La
obra de Diego Quijano es un testimonio gráfico de una Lima de las últimas décadas del siglo XX y de inicios de esta
nueva centuria: de sus cambios demográficos y de la diversidad, de aquella Lima
racista pero de imponente arquitectura
que contrastaba con la espontánea sencillez en el diseño de las construcciones
de los populosos distritos (algunas de esas grandes edificaciones, ya
desaparecidas) que gracias a su arte, Piero Quijano ha conseguido inmortalizar
y asimismo crear conciencia a las nuevas generaciones de peruanos con su trabajo artístico que aunque cronológicamente
pertenece a otro contexto de nuestra historia, continúa invitándonos a la
reflexión y a revalorizar muestra identidad en este emergente siglo XXI.
Rosa
María Vargas R.
Historiadora,
Critica de Arte y Curadora Independiente.
NOTA:
La
exposición continuará abierta al público hasta el 23 de Octubre, en la sala
Luis Miró Quesada Garland: Av Larco 400, distrito de Miraflores - Lima,Perú
dentro del siguiente horario: De Martes a Domingo desde las 11:00 a.m. hasta
las 10:00 p.m.